Todos los componentes de una instalación fotovoltaica
Dar el paso a la energía solar es una de las formas más inteligentes de ahorrar en tu factura de luz. Pero para que una instalación fotovoltaica funcione y puedas maximizar tu ahorro, es clave entender cuáles son sus componentes esenciales: placas solares, inversores, baterías y una solución integral.
El componente principal: placas Fotovoltaicas
Las placas solares son el corazón de cualquier instalación fotovoltaica. Son las encargadas de captar la energía del sol y transformarla en electricidad aprovechable para tu vivienda o negocio. Su eficacia depende del tipo de panel (monocristalino, policristalino o de capa fina), de la calidad de sus células y de cómo estén orientadas e instaladas. En esencia, cuanto mejores sean las placas y más luz reciban, mayor será la producción de energía y el ahorro en tu factura.
El componente obligatorio: Inversor solar
El inversor solar es un elemento imprescindible en cualquier instalación fotovoltaica. Su función es convertir la energía en corriente continua (CC) que generan las placas solares en corriente alterna (CA), que es la que utilizan los electrodomésticos y la red eléctrica de tu hogar. Además, el inversor gestiona la producción, monitoriza el rendimiento y protege el sistema ante posibles fallos.
En pocas palabras, es el “cerebro” de la instalación y de él depende gran parte de la eficiencia, la seguridad y el control de tu sistema solar.
El componente imprescindible para excedentes: Contador bidireccional
Dispositivo que mide tanto la energía que consumes de la red como la que tus paneles solares inyectan cuando producen más de lo que usas. Es imprescindible si tu instalación de autoconsumo está acogida al mecanismo de compensación de excedentes.
En general basta con uno solo por instalación, y la mayoría de los contadores digitales ya están preparados o solo requieren programación adicional. El coste de adquisición ronda los 100-300 €, aunque lo habitual es alquilarlo a la distribuidora por unos 10 €/año.
Resolvemos todas tus dudas
Resolvemos todas tus dudas
El componente recomendado en instalaciones aisladas: Batería solar
La batería solar es un dispositivo que permite almacenar la energía generada por las placas solares, para utilizarla cuando la producción cae (por ejemplo de noche o en días nublados). En instalaciones aisladas —es decir, que no están conectadas a la red eléctrica— se convierte en un elemento esencial porque no hay otra fuente a la que recurrir.
Existen varios tipos de baterías según su tecnología:
Monoblock: económica, útil para consumos bajos, pero menos adecuada para picos grandes de potencia.
Estacionarias (por ejemplo OPzV, OPzS): diseñadas para uso constante diario, mayor vida útil.
AGM: sin mantenimiento, adecuada para descargas intensas.
Litio: la más eficiente y de mayor vida útil, aunque con mayor inversión inicial.
En resumen: si tu instalación está aislada de la red, contar con una batería solar adecuada es la clave para tener autonomía real y aprovechar al máximo tu sistema fotovoltaico.
Regulador Solar
Dispositivo esencial en instalaciones con baterías solares que controla tanto la carga como la descarga de los acumuladores, protegiéndolos de sobredescargas o sobrecargas y asegurando su vida útil. Se diferencian principalmente dos tipos:
- PWM: económicos, para instalaciones pequeñas con baterías y paneles de igual tensión.
- MPPT: más eficientes (hasta ≈ 30 % más), capaces de adaptar tensiones distintas entre paneles y baterías; recomendados para instalaciones mayores.
No es necesario en instalaciones conectadas a red sin acumuladores.
El componente de control: Sistema de monitorización
El sistema de monitorización permite ver en tiempo real la producción de tus paneles solares y el consumo de tu hogar, además de enviar alertas ante posibles averías. No es obligatorio en todas las instalaciones, pero resulta muy recomendable para detectar fallos, optimizar el rendimiento y conocer el ahorro real que genera tu autoconsumo. Su precio puede variar desde unos 100 € para sistemas básicos hasta varios cientos de euros para plataformas más completas.
Aprovecha el sol y paga menos en tus facturas
Aprovecha el sol y paga menos en tus facturas
Todo en uno: El kit solar
Un kit solar es un paquete que reúne los componentes esenciales para instalar un sistema de autoconsumo fotovoltaico en tu vivienda, oficina o finca.
QUÉ DEBE INLCUIR:
- Placas solares.
- Inversor solar.
- En muchos casos también baterías (si se desea almacenamiento) y regulador de carga.
- Otros componentes secundarios que pueden venir incluidos: estructuras de soporte para las placas, cableado, conectores.
POR QUÉ VALE LA PENA:
- Comprando un kit se simplifica bastante la elección, ya que los componentes vienen compatibles y el sistema está pensado para funcionar como conjunto.
- Ayuda a reducir factura eléctrica y apostar por energía renovable, sobre todo si escoges bien la potencia según tu consumo.
FACTORES A TENER EN CUENTA:
- Define bien cuántos paneles necesitas: esto depende de tu consumo y de la potencia que puedas instalar.
- El precio varía mucho según el tamaño del kit, la inclusión o no de baterías, la calidad de los componentes.
Aunque los kits permiten “hacerlo tú mismo”...
Es recomendable que la instalación sea realizada por un profesional certificado, para asegurar compatibilidad, seguridad y cumplimiento normativo.
Asesoramiento gratuito
Asesoramiento gratuito