Contar con un seguro de hogar es altamente recomendable si quieres evitar problemas en caso de producirse un siniestro. Te contamos cuáles son estos problemas y cuáles serían las consecuencias de no contar con una póliza para tu vivienda.
¿Tengo que contratar un seguro de hogar?
En un principio, no es obligatorio tener un seguro de hogar contratado, salvo que la vivienda se encuentre hipotecada. Por ello, vamos a hablar de dos casos:
1. La vivienda está hipotecada: cuando firmas una hipoteca, parte de la vivienda pertenece al banco hasta que se cancela dicha hipoteca. Por ello, el artículo 10 del Real Decreto 716/2009 estipula la obligatoriedad de contar con un seguro de hogar, ya que asegura la casa contra posibles daños por el valor de la tasación.
2. La vivienda no está hipotecada: aunque no tengas la obligación de contratar un seguro de hogar, es muy recomendable adquirir uno, ya que te protege ante multitud de imprevistos que pueden suponer un varapalo económico.
¿Qué pasa si no tengo seguro de hogar?
Si la vivienda está hipotecada, estás obligado a contar con un seguro, ya que funciona como una garantía para el banco. Si lo das de baja, te puedes enfrentar a una demanda por parte de la entidad. Por ello, antes de cancelar el seguro de hogar, asegúrate de haber contratado otro para la fecha de cancelación del primero, y siempre notificándoselo al banco.
Si no tienes hipoteca, tú decides si contratar un seguro de hogar o no y, por ello, vamos a explicarte qué pasa si no tienes un seguro de hogar:
Tienes que pagar de tu bolsillo los siniestros graves en tu casa: si se daña tu casa a causa de un incendio o de una inundación, tendrás que pagar tú mismo los arreglos, siendo estos bastante caros. En cambio, si cuentas con un seguro, es este quien se encarga de solventar los daños hasta el límite de la póliza y, si la casa queda inhabitable, se encarga de los gastos del traslado de enseres que aún estén bien y del alquiler de otro inmueble para poder vivir en él.
Debes pagar los desperfectos en tu casa: en muchas ocasiones, los seguros incluyen las roturas de cristales, espejos, vitrocerámicas, mármoles y sanitarios. En caso de no contar con un seguro de hogar, serás tú quien tenga que reponer estos elementos.
Debes solucionar los daños en casa del vecino provocados por problemas en tu vivienda: si la casa de tu vecino de abajo tiene humedades en el techo, está claro que el problema viene de tu casa y, con ello, el arreglo de dichos problemas. Si no cuentas con un seguro, tendrás que abonar la reparación de las filtraciones de agua, que de media cuestan 400 €.
El contenido de tu vivienda no está cubierto ante un robo: si un ladrón entra en tu domicilio y sustrae tus pertenencias, podrás denunciarlo, pero sin un seguro de hogar que te lo cubra, lo más normal es que no recuperes nada ni obtengas una compensación.
Indemnizaciones por accidente: si una persona sufre un accidente en tu vivienda, decide denunciarte y el juez te exige una indemnización, tendrás que hacerte cargo de ella. En cambio, con un seguro de hogar con responsabilidad civil, tanto la defensa legal como la indemnización están cubiertas.
Por norma general, sale mucho más rentable adquirir un seguro de hogar que no tenerlo, ya que el precio medio de un seguro de hogar está en 140 €/año, unos 4.000 € en 30 años. Una reparación básica ya cuesta más de 300 € y, si nos ponemos en casos graves como un incendio, la suma puede ascender a miles de euros.
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¿Qué pasa si mi vecino no tiene seguro de hogar?
Pueden darse varias situaciones en el caso de que tengas humedades por desperfectos en la vivienda de tu vecino de arriba y este no disponga de seguro:
- Qué tu vecino pague el arreglo: la situación ideal es avisar a tu vecino y que este se haga cargo de la reparación de fontanería de su casa y del arreglo del techo de la tuya.
- Qué tu vecino se niegue a pagar y tú tengas seguro: si dispones de una póliza de hogar, puedes hablar con tu aseguradora para que repare los desperfectos y reclame el coste de la reparación a tu vecino gracias a la cobertura jurídica que te proporciona el seguro.
- Qué tu vecino se niegue a pagar y tú no tengas seguro: en este caso, debes exponer la situación ante la comunidad de propietarios e interponer una demanda judicial contra tu vecino, corriendo con los gastos jurídicos.
¿Qué pasa si tengo el piso en alquiler y no tengo seguro de hogar?
Contar con un seguro de hogar para una vivienda en alquiler es altamente recomendable, ya que proporciona las siguientes ventajas respecto a quienes tienen pisos en alquiler, pero no cuentan con seguro de hogar:
- Reparaciones por desgaste: los alquileres producen bastante desgaste en los electrodomésticos, sobre todo, si se trata de un alquiler por habitaciones. Por ello, es aconsejable contar con un seguro de hogar que cubra dichos aparatos, de forma que si uno se avería por desgaste habitual, se hace cargo el seguro.
- Buenas relaciones: puede suceder que algo se dañe por un mal uso y no por desgaste habitual, pero si el seguro cuenta con servicio manitas, la reparación puede salir muy barata o, incluso, gratis. Muchos propietarios asumen este tipo de gastos, potenciando la buena relación con los inquilinos.
- Cobertura de pérdida de llaves: una cuestión de gran importancia es la pérdida de las llaves por parte de los inquilinos y quién paga en caso de olvido. Si tu seguro lo cubre, no tienes que preocuparte de nada ni tus inquilinos tampoco.
Enlaces de interés
Especialista en Seguros
Óscar se incorporó a Selectra en 2019 como creador de contenido y, en 2023, se hizo cargo del departamento de seguros, debido a su conocimiento del sector. Su principal función es ofrecer al usuario asesoramiento experto en la materia, con el fin de dar a conocer el seguro que más se adapta a sus necesidades.