Así ha evolucionado el reproductor de música en el último siglo

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Hoy, 21 de junio, coincidiendo con el solsticio de verano, se celebra el Día Europeo de la Música, una celebración internacional que tiene como objetivo ensalzar su valor. En numerosas ciudades, y durante todo el día, músicos y artistas aprovecharán la oportunidad para tocar en la calle con el objetivo de darse a conocer y de que el público pueda disfrutar de las canciones y melodías de sus artistas preferidos.

La música forma parte de cada momento de nuestra vida y, a día de hoy, resulta muy difícil imaginar los trayectos al trabajo, hacer deporte o ir a una fiesta sin ella. Sin embargo, no siempre se ha escuchado de la misma forma.

A lo largo de las décadas hemos podido ver cómo los aparatos de reproducción musical han ido cambiando para adaptarse a los nuevos tiempos y a la tecnología. Esta ha sido su evolución:

Tocadiscos. Tras varias modificaciones del gramófono, en 1925 llegó el tocadiscos, un reproductor musical formado por un plato giradiscos, una cápsula y un brazo fonocaptor. Este aparato amplifica la música que contiene un disco de vinilo a través de la aguja que recorre la pista grabada en el soporte y reproduciendo la vibración inscrita en él.

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Radio cassette. En los 60 se puso de moda este formato de grabación de sonido de cinta magnética. La casa Philips fue la primera en lanzar el producto.

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Walkman. El Walkman fue creado en 1979 por la compañía japonesa Sony. Este aparato, transportable a cualquier parte debido a que funcionaba con pilas, reproducía la música grabada en el cassette.

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Discman. Las cintas dieron paso a los CD y, por este motivo, también se tuvo que cambiar de modelo de reproductor musical. El primero fue fabricado por la compañía Sony en 1992. Este formato de audio digital de alta calidad consistió en una máquina que podía reproducir o grabar sonido en él.

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El reproductor MP3.Aunque se inventó en 1993 por la empresa alemana Fraunhofer-Gesellshaft, su uso no se empezó a extender hasta la entrada del nuevo milenio. Este reproductor fue un paso más hacia la era digital, ya que funcionaba con una memoria interna y por medio de un software.

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Este tipo de reproductor fue el impulsor del ipod que dio paso a una revolución prácticamente sin límites en cuanto a la cantidad de música que se puede almacenar.

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En la actualidad podemos disfrutar de nuestra música en cualquier dispositivo móvil, usando la música almacenada en el mismo, o a través de plataformas de música en streaming, como es el caso de Spotify.