Entrevista a Joaquín Giráldez, socio cofundador de Ingebau

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Ingebau, nacida en 2006, es una empresa consultoría, especializada en el mercado eléctrico. Su socio cofundador, Joaquín Giráldez, ha respondido a las preguntas de Selectra sobre energías renovables.

¿Considera que el acceso a la energía debe ser un derecho como el acceso a la sanidad?

Tal vez la palabra derecho sea demasiado grande. No obstante, la electricidad ha sido considerada Servicio Público (antiguo marco regulatorio previo a la liberalización), Servicio Esencial y Universal (ley 54/97) y actualmente Servicio de Interés Económico General(Ley 24/13).

Tecnicismos aparte, es indiscutible que no podemos vivir sin electricidad, no podemos realizar procesos productivos sin energía y, por tanto, debe haber acceso universal y económico a la misma.

El pasado 2019, al contrario que otros años, el precio de la luz en el mercado regulado fue estable y relativamente bajo para los usuarios. ¿A qué se ha debido? ¿Debemos esperar que en los próximos meses ‘estalle’ el precio en algún momento?

Por una parte se puede pensar que la electricidad es barata. En mi casa somos 5 y, gracias a la electricidad, podemos calentar la casa, ducharnos, conservar la comida en la nevera y cocinarla por menos de 60 euros al mes. El gasto es mínimo comparado con el que hacemos en otras cosas más superficiales.

Sin embargo, se puede afirmar que el precio final de la energía es caro considerando su coste de producción. Somos el quinto país de la Unión Europea con la factura eléctrica más cara. Esto es debido a los costes de las políticas energéticas incluidos en la factura y los impuestos. Es cierto que el componente de mercado ha estado bastante estable este año, las bajadas en los precios de combustibles han compensado las subidas en los derechos de emisiones, pero personalmente no debemos estar orgullosos del precio de la electricidad que tenemos. Quita poder adquisitivo a particulares y resta competitividad a nuestra industria.

Las energías renovables van en aumento. Dentro de ellas, el liderazgo de la energía eólica en nuestro país es indiscutible. Según REE, en la cobertura de la demanda, la aportación hidráulica en 2019 fue un 13,2 % frente al 7,2 % del año anterior. ¿A qué se debe el incremento de la aportación hidráulica al mix energético en 2018?

En nuestro país el liderazgo de generación lo tiene históricamente la energía nuclear, este año con los derechos de emisiones, los ciclos combinados han arañado cuota al carbón y han superado a la nuclear.

En 2019, dentro de las renovables, la eólica dominó la producción. No en vano hay 23 GW de potencia instalada y mucho recurso eólico. En hidroeléctrica tenemos 20 GW instalados, pero un recurso más bajo. El 2018 fue un gran año hidráulico -muchas precipitaciones- muy por encima del 2017 y 2019. Esto, unido a los precios altos de mercado, favoreció este tipo de producción.

Las Garantías de Origen son la única fórmula de la que disponemos en este momento para poder certificar energía renovable. ¿Cómo cree que debería ser el proceso de trazabilidad del origen de la energía?

Tengo sentimientos encontrados con las GdOs -Garantías de Origen-. Entiendo que los productores quieran cobrar un valor añadido por su energía renovable y me parece muy interesante que los consumidores estén dispuestos a pagar más por ello.

Eliminaría la forma actual de certificación transferencia y redención de GdOS, impondría un sistema dinámico de venta y asignación de GdOs y trataría de sacar a representantes y comercializadoras de este negocio. Soluciones de siglo XXI para situaciones de siglo XXI que a día de hoy se legislan según tecnologías del siglo XIX. Algunos hablan de Blockchain para esto, a lo mejor sólo necesitamos unos buenos contadores eléctricos con telemedida.

¿Cuáles cree que son la o las medidas que debería tomar el Gobierno para impulsar definitivamente un cambio de modelo energético?

El modelo energético está cambiando. Pero no lo han hecho los gobiernos. Los avances tecnológicos han provocado que las renovables sean más baratas que las convencionales y por eso nuestro mix va cambiando. Sin embargo, seguimos teniendo el reto de la no gestionabilidad de las renovables. A pesar de que muchos vemos con ilusión las nuevas alternativas de almacenamiento, estas no son económicamente viables a gran escala. Estoy seguro de que llegarán, pero ni yo ni nadie sabe cuando. Mientras tanto tendremos que vivir con una alta penetración de energías no gestionables con una demanda rígida. Ahí es donde los gobiernos deben actuar.

La participación de la demanda en los servicios de ajuste, la creación de unos peajes de acceso que se adapten a la nueva energía renovable -peajes muy baratos en horas de alta producción renovable y muy caros fuera de estas horas- incentivarán el uso de baterías, mejoras en las interconexiones, aumento de la electrificación de la sociedad.

Muchos hablan de aumentar las subastas renovables, pero no creo que ese sea el problema. Para fomentar la promoción de nuevos parques renovables, basta con acabar con la especulación de los puntos de conexión y dejar que los verdaderos promotores puedan hacer.

En nuestro país el liderazgo de generación lo tiene históricamente la energía nuclear, este año con los derechos de emisiones, los ciclos combinados han arañado cuota al carbón y han superado a la nuclear.